Esta entrada es un «regalo» que nuestros amigos Octavio y Emilio nos han hecho a todos nosotros, los que nos gusta andar por el monte. Ellos han recuperado el camino de Titaguas a la aldea de Los Felipes, el cual forma parte del antiguo Camino Real de Titaguas a Benageber. Para ello han echado mano de la memoria de algunos vecinos de Titaguas, han dedicado horas por el monte para buscar y aclarar tramos perdidos por el paso del tiempo e incluso ofrecernos alternativas para crear este estupendo y exigente recorrido circular entorno a la Rambla o Barranco de Canales.
Algo más de 16 kilómetros, 814 metros de desnivel realizados en 7 horas y media (paradas incluidas) en las que disfrutamos de la naturaleza, de la compañía, el vino y las pastas de Titaguas. Pincha aquí para ver la ruta en wikiloc.
El camino recuperado nos lleva de Titaguas a Los Felipes, una aldea que se abandonó por la construcción del pantano de Benageber en la década de los 60 obligando a los vecinos a irse a localidades vecinas. Uno de ellos, Miguel Moreno » el de la Julieta», vecino de Titaguas, abandonó la aldea cuando tenía unos 10 años. Basándose en su información Octavio y Emilio se pusieron a buscar el camino que a continuación os describimos:
Dejamos los coches en Las Corralizas, al final del Hondón, a unos 3 km de Titaguas.
Tomamos la pista que a través del Collado Calcina nos llevaría a Zagra; poco después de pasar el Barranco de la Hoya del Maestro y el camino que baja al molino, abandonamos la pista para coger un estrecho sendero que nos lleva a la antigua traza del Camino Real. El camino discurre en bajada por la ladera del Barranco de Canales. En realidad la verdadera entrada estaba un poco más adelante pero su acceso desapareció bajo un terraplén de la pista forestal.
Ya en el camino, tras cruzar el barranco del Zaragozano, el sendero baja zigzagueando por la zona de La Escaleruela, junto a un gran dedo rocoso rojizo.
Seguimos por la Solana de Canales a la sombra del Cerro Somilla y de un tupido pinar. En este tramo nos desviamos un poco para visitar unos antiguos hornos de yeso, próximos a un aljezar (cantera de yeso) cerca del sendero.
Poco después pasamos por una zona de terrazas de labor abandonadas, ahora convertidas en un pinar sombreado, donde había un abrigo utilizado por los maquis en las paredes superiores de nuestra derecha. Seguimos el camino cruzando un par de barranquitos que se precipitan a la rambla.
Cuando adivinamos el fondo del Barranco de Canales, abandonamos el camino tradicional, ya que actualmente está excesivamente perdido y recuperarlo hubiera sido una ingente tarea para sólo dos personas y sin medio alguno. Así que bajamos hacia un dique de contención que se ve desde lo alto y lo cruzamos.
Salimos a la pista que seguiremos durante un tramo y por la que pasaremos por un refugio (cerrado).
Abandonamos la pista en la zona de La Rinconada de los Pinos para bajar de forma bastante directa a la aldea abandonada de Los Felipes, que se encuentra ligeramente elevada sobre el cauce del río Turia.
Antiguamente había un puente que comunicaba con la otra orilla para continuar camino a Benageber o a la aldea vecina de Las Olmedillas.
Tras merodear por las ruinas del caserío, bajar al cauce y observar el puntal de Gibraltar, volvemos sobre nuestros pasos hasta el dique por donde cruzamos la Rambla de Canales.
A partir de aquí seguiremos por la pista que nos llevaría -si siguiéramos recto a la carretera en la zona de Potranca- pero vamos tomando los desvíos que nos indican a la Fuente de la Umbría.
Este es el tramo más tedioso de la ruta ya que la pista discurre por enmedio de un cortafuegos desbrozado recientemente.
Después de dos desvíos señalizados llegamos a la fuente de aguas levemente salobres, en la zona de la Umbría Empinada.
Pasamos la fuente y seguimos hasta que se acaba el camino, donde aprovechamos para comer y beber productos Titagueños (vino, longanizas, pastas).
A partir de aquí utilizamos una vieja senda por el barranco de La Comina, recomendada por «el tío Barra». Él la utilizaba cuando de niño pastoreaba por la zona. La senda discurre durante un trecho por este barranco, nosotros descendemos al fondo el barranco y lo remontamos para coger un barranquillo a nuestra izquierda que nos servirá para salir a unas terrazas abandonadas de almendros con vistas al Castillarejo.
Una vez fuera seguimos remontando hacia nuestra izquierda.
El objetivo es acercarnos al Barranco del Canales por arriba a la altura de la Hoz Cerrada, donde podemos disfrutar de unas caídas al fondo del barranco bastante impresionantes.
A partir de aquí nos alejamos de la hoz para ir a buscar una bajada al barranco -junto a la base de unas paredes- abierta por nuestros amigos. Este tramo, al que llamaremos “la vía Badimón-Vila”, confluye en una antigua senda que baja al barranco a la altura de otro dique construido en 1993 por el extinto ICONA.
Una vez en el dique bajamos al lecho embarrado de la rambla.
Remontamos hasta el molino de Juan Polla y pasamos por la zona del Charco Negro. Tras la fotos de rigor proseguimos hasta llegar a la pista donde habíamos dejado los coches.
Muchas Gracias a los amigos Emilio y Octavio por invitarnos a la puesta de largo de esta magnífica ruta.
Muchas gracias amigos Raquel y Manolo. Un magnífico relato del recorrido que hicimos ayer. Espero poder compartir con vosotros nuevos recorridos. Un abrazo, Emilio.
El buen trabajo que habéis hecho, no merecía menos. Seguro que encontráis viejos caminos o sendas que recuperar. Gracias por el regalo.